domingo, 1 de mayo de 2011

Viernes Santo: Procesión Penitencial de Jesús de la Merced y Santísima Virgen de Dolores. La Merced 2011

La Parroquia de Nuestra Señora de las Mercedes, presta a recibir a los devotos de Jesús de la Merced como tantos Viernes Santos.

Hablar de Jesús de la Merced, es hablar de la propia historia del pueblo guatemalteco, este Nazareno, inspiración de muchos artistas, de tantas oraciones y súplicas que fuera tallado en 1655 por el escultor Mateo de Zúñiga y puesto a la Veneración un Sábado Santo 27 de marzo de ese mismo año; la esencia de la Semana Santa Guatemalteca alcanza su máxima expresión en este entrañable y solemne Cortejo Procesional, a este Nazareno en quien las autoridades municipales juraron ante él, con juramento sobre los Evangelios como Patrón Jurado contra pestes, temblores y demás calamidades, al que invoca con rogativas, como las últimas en el año de 1976 por el terrible terremoto y recientemente el año 2001 con motivo del primer viernes del nuevo siglo y milenio, el Peregrino bendito del Señor que viajó a su primera morada, la Antigua Capital del Reino de Guatemala, hoy la Ciudad Patrimonio de la Humanidad Antigua Guatemala en el año 2005 conmemorando sus 350 años. No alcanzaría un blog entero para hablar de esta excelsa talla cumbre de la imaginería de Semana Santa.

A las 4:00 de la madrugada de un frío Viernes Santo que un par de horas antes había sido bañado con una fuerte lluvia que se temía continuara durante el día, afortunadamente no pasó así, puntual a lo programado egresó el Solemne, Majestuoso y Penitencial Cortejo Procesional con la Consagrada Imagen de Jesús Nazareno de la Merced y Santísima Virgen de Dolores, la ultima procesión de un Nazareno por las calles del Centro Histórico, para impartir santas bendiciones y rememorar el tortuoso camino del gólgota.

Las andas de caoba de 1958 flanqueada en sus cuatro esquinas con sendos leones mercedarios presentaban una bella alegoría, sencilla pero muy significativa y de fácil comprensión, tomada del Salmo 17: SEÑOR, MUESTRAME TU ROSTRO, en la parte inicial se apreciaba este salmo tallado en piedra. El adorno que recordaba el de 1995 con la alegoría del llanto del Señor sobre Jerusalén, se componía de un campo ruinoso con grandes columnas quebradas, dentro de este panorama sobresalía en una cornisa semidestruida la Consagrada Imagen de Jesús Nazareno de la Merced, que vestía bella túnica de terciopelo morado uva con bordados de arabescos en oro, lucida en los años de 1973 y 2004. A sus pies del lado derecho yacía dormida la Santa mujer Verónica quien tenía en sus manos un hermoso sudario con el rostro del Nazareno Mercedario, sin resplandor ni corona de espinas muy bien logrado. Complementaban el adorno flores moradas artesanales y en la parte posterior en una roca se leía: PARA CONTEMPLARTE AL DESPERTAR. Una hermosa alegoría que nos recordaba la leyenda sobre la monja que pidió a Dios conocer como había sido el rostro del Señor en la vida terrenal y luego de varias vicisitudes le fue revelado que podía encontrar el rostro auténtico del Señor en la imagen de Jesús de la Merced.

Por su parte la Santísima Virgen presentaba la alegoría:  EN TU VIDA TE AMÓ CON TERNURA, en una disposición similar al anda de Jesús, se apreciaba un campo ruinoso en la parte inicial un ángel sosteniendo un paño con sangre, ofreciendóselo a la Santísima Virgen de Dolores de la Merced, ataviada con tunicela de terciopelo en color beige con bordados en oro y manto morado con bordados de flores en oro, estrenado en el 2005, tras ella la Cruz donde el señor ofreció su vida junto a las armas christi o instrumentos de la pasión. 

Sin duda alguna la procesión de Viernes Santo aglutina gran cantidad de devotos que por última vez visten la túnica morada acompañando en el suplicio al Señor, el paso solemne en la madrugada, amaneciendo en el Parque Morazán, el paso por la Primera Avenida, escuchar Señor de la Merced en el Portal, para que antes de mediodía se encuentre sudando frente a Catedral Metropolitana al compás de Señor Pequé y seguir el cadencioso paso que fue sorprendido por una leve lluvia al pasar Santa Teresa pero que duró antes del paso por el parque Colón, para posteriormente acelerar un poco el paso para que el Señor estuviera a las 3 de la tarde en el crucero del templo mercedario abarrotado y juntos rezar el Credo ante Jesús de la Merced que se encontró con la impresionante talla barroca del Cristo de la Agonía que presidía el Altar Mayor junto a la Virgen de Soledad y San Juan Evangelista. La despedida nostálgica de Viernes Santo. Todo está consumado.

Dedico esta entrada al Dulce Nazareno Mercedario, por permitir a su servidor otro año más caminar de inicio a fin junto a él y pedirle bendiciones, salud y vida para estar junto a él y ayudarle a llevar su pesada cruz otro Viernes Santo más.

Paso de Jesús de la Merced sobre la 11 avenida frente a su templo.




Amanecer junto al Parque de Jocotenango







Mar morado junto al Señor Mercedario, en San Sebastián.





La Dolorosa en pos de su hijo divino.

El Sudario con el auténtico rostro de Jesús, evocando a la religiosa que encontró el rostro terrenal de Jesús, en el rostro bendito de Jesús de la Merced. Curiosamente el rostro de Jesús de la Merced ha sido reproducido por segunda vez en un sudario en una anda procesional, el quinto viernes de cuaresma en San Francisco había un sudario similar.

El soberbio estandarte pintado por Luis Alberto de León.




Los leones mercedarios en las esquinas del anda de Jesús.

Magnífico estandarte de la Santisima Virgen pintado por Luis Alberto de León.

San Juan Evangelista portado por pequeños cucuruchos, cantera de futuros cargadores de Jesús.


Poco menos un siglo atrás el paso de Jesús era precedido por estas imágenes, este año afortunadamente se ha recuperado esta costumbre con las mismas imágenes ya restauradas.








Una de las tantas leyendas que se tejen alrededor de Jesús, reza que al momento en que el Nazareno pasa frente a Catedral, suda, las abuelitas citan siempre esta leyenda en dicho momento. Como en esta fotografía captada en ese preciso instante. Juzgue usted.



Luego de la llovizna los colaboradores proceden a quitar el plástico que protegía la sagrada imagen en medio del ambiente caluroso del astro rey que se hacía presente para endurecer el suplicio del mártir de la paz.










Los momentos más emotivos del cortejo, la Salida y la Entrada, captados en este video.


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